• Infección de mama (Mastitis)

    Esto es cuando hay dolor o un bulto en el pecho. Puede causar fiebre, náuseas, vómitos, secreción amarilla del pezón o senos calientes o que se sienten calientes al tacto y que se pongan rojos. Para ayudar, puede amamantar del lado afectado o Masajear el área. También puede poner un paño caliente donde le duele o usar un sostén cómodo. Si ambos senos están afectados, hay pus o sangre en la leche, o tiene rayas rojas cerca del área afectada del seno, llame a su médico inmediatamente.

  • Infección micótica

    Esta es una infección que se puede formar en los pezones o en el seno. Algunos signos de esto son pezones rosados o irritados después de meses de amamantamiento libre de dolor, escamoso, brillante, picazón, o pezones agrietados. Para tratar estos problemas, cambie sus almohadillas varias veces. También trate de usar todos los días  un sostén o sujetador limpio, hervir todos los chupones, pezones de botella y juguetes para que estén limpios y lavar las manos de su bebé varias veces.

  • Pezones invertidos, planos o muy grandes

    Si sus pezones son planos o incluso si son muy grandes, puede ser que se le haga difícil al bebé amamantar de la manera correcta. Si tiene pezones planos, intente usar los dedos para sacarlos. Si tiene pezones muy grandes, con el succionar del bebé mejorará con el tiempo.

  • Rechazo a Amantar

    El rechazo a amamantar es cuando su bebé ha estado amamantando durante meses y luego empieza a rechazarlo. Esto puede significar que algo está mal, no así que el bebé esté listo para ser destetado. Algunas causas de este rechazo son: dolor de boca, infección del oído, enojo, o que esté con la nariz tapada lo que le hace difícil respirar mientras se alimenta. trate de extraer leche generalmente cuando esté alimentando al bebé para que los conductos no se tapen. También puede usar una cuchara para darle su leche al bebé para que siga alimentándose, descansando y comenzando de nuevo si él o ella se enoja.

  • Reflejo Fuerte de Bajada

    Esto sucede cuando la leche sale con fuerza, por lo general cuando hay exceso de leche. Para tratar de ayudar con este problema, puede sostener su pezón entre su primer dedo y el del medio y levemente empujar su pecho hacia abajo para reducir la fuerza de salida de la leche. También puede intentar alimentarlo mientras esté acostada de lado para que la fuerza de la gravedad reduzca.

  • Hinchazón

    Esto es cuando sus pechos se ponen duros causando dolor debido a lo llenos que están. Puede causar hinchazón, dolor, calor, enrojecimiento, fiebre baja o aplanamiento del pezón. Algunas formas de ayudar son amamantar seguido, Masajear el pecho, utilizar paños fríos para aliviar el dolor, y un sujetador que ajuste bien y que no sea demasiado apretado.

  • Conductos Taponeados

    Los conductos tapados se sienten como un bulto blando y dolorido en el seno. Esto sucede cuando la leche no drena correctamente. Para ayudar, puede amamantar con el lado afectado cada dos horas, masajee el área, duerma más, y coloque la barbilla de su bebé en el lugar afectado cuando él o ella se alimente.

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Fuente: womenshealth.gov